Y comieron perdices. Aunque los números puedan parecer sensiblemente peores que los conseguidos en años anteriores, lo cierto es que los socios de Garrigues salieron muy satisfechos de la Junta de socios celebrada ayer.
El crecimiento de la firma fue del 0,7% hasta unos ingresos totales de 355,2 millones de euros frente a los 352,8 del ejercicio anterior.
Si se analizan las cifras en frío, parecería que el declive de la firma es imparable. Sin embargo, hay que colocar un dato significativo al otro lado de la balanza: el número de profesionales de Garrigues ha descendido desde los 2.037 hasta los 1.945. De esta forma, la firma ha conseguido aumentar la facturación por profesional desde 173.195 euros hasta los 182.622 euros.
Con estos resultados queda claro que Fernando Vives -ahora en solitario al frente del despacho- empieza a cumplir el objetivo que se propuso al comenzar el mandato: aumentar la productividad y, si es posible, la rentabilidad.
Es cierto que la situación económica cada vez más complicada se nota también en los despachos de abogados -con más fuerza cada año que pasa- pero en Garrigues tenían claro hacia dónde debían dirigir el rumbo y parece que lo están consiguiendo.
En la pasada junta de socios celebrada en Alicante en el mes de julio, la firma implementó una serie de acuerdos muy significativos para el despacho. El primero de ellos fue el paso a socio de cuota de todos los socios profesionales de la firma. De esta forma sólo quedan socios de denominación para casos muy excepcionales. En dicha junta también se adoptó el acuerdo de alargar la edad de jubilación hasta los 60 años frente a los 56 en los que estaba marcada anteriormente.
El tercero de los acuerdos adoptados modificó el modelo de dirección del despacho, que hasta el 31 de agosto compartían dos socios directores mancomunados: Fernando Vives y Ricardo Gómez-Barreda. En este nuevo año fiscal, Garrigues cuenta con un socio director único (Fernando Vives), que será el responsable de la gestión de la firma, y con un senior partner (Ricardo Gómez-Barreda), quien supervisará la implementación de los acuerdos de la Junta, se ocupará de los conflictos de interés y asesorará al socio director cuando sea necesario, entre otras funciones.
Ayer, los socios de la firma aprobaron el nombramiento de 21 nuevos socios (19 de cuota y 2 de denominación) y se elevó a la categoría de socios de cuota a otros cuatro socios de denominación. Vamos, un galimatías pero que contenta a todos.