La era actual está marcada por una adaptación al mundo laboral que implica ser consciente de que muchos profesionales necesitan ir reciclándose continuamente para seguir siendo funcionales en el mundo laboral.
Algunos colectivos, especialmente las personas que superan ya una edad adulta mediana, es decir, cuando se acercan a los 50 años, encuentran en algunas ocasiones ciertas dificultades para continuar en el mercado laboral y seguir resultando atractivos para las empresas.
Esto se debe, en parte, a la digitalización y la automatización de la sociedad, que impone estar cada vez más conectados a las nuevas tecnologías e introducir procesos en las empresas que dependen en gran medida de internet y las nuevas disciplinas relacionadas con la red de redes: Big Data, Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas…
En la actualidad, salvo contadas excepciones, prácticamente ninguna persona es capaz de mantener su profesión durante toda su vida laboral activa. Esto ocurre porque vivimos en un mundo cambiante en el que las profesiones se van adaptando a la nueva realidad y los profesionales deben saber reciclarse y estar continuamente formándose.
Todo esto se conoce como pedagogía de la incertidumbre y hace referencia a esa inquietud por no saber qué deparará el futuro laboral de cada persona y adquirir capacidades para sobreponerse a los cambios que impone la sociedad, para continuar siendo atractivo laboralmente.
La pedagogía de la incertidumbre en el ámbito empresarial
Desde un punto de vista empresarial, la formación de los empleados es también una de las herramientas más importantes de cualquier organización, porque esto ayuda a ganar en productividad. En cualquier empresa, uno de los objetivos primordiales de la organización debe ser conseguir la capacitación de los empleados para que esto se traduzca en más productividad, más conocimiento y habilidades más potenciadas.
Una empresa funciona con métodos de sinergia, es decir, el todo es más que la suma de las partes. Si se consigue que cada parte saque lo mejor de sí misma, se puede conseguir un todo más fuerte que las propias partes por separado.
Muchas empresas acuden a FUNDAE para interesarse cada año por los cursos subvencionados para trabajadores, porque son conscientes que la formación impartida por EboGestión ayuda a mejorar las competencias de empresarios y trabajadores en este mercado laboral en constante cambio.
Con la actividad formativa subvencionada, los beneficios no son solo para la empresa, ya que los empleados ven aumentado su rendimiento y motivación. La formación tiene también por objetivo que el desempeño profesional en la empresa sea lo más óptimo posible.
Los trabajadores, con la formación continua, adquieren nuevas competencias y conocimientos que les ayudan a conseguir sus metas, lo que acaba teniendo como resultado un beneficio mutuo para trabajadores y empresas.
La digitalización, ¿cómo evitar ser víctima de la brecha digital?
Un claro ejemplo de la necesidad de adaptarse a los cambios que impone la sociedad a través de la formación es el proceso de digitalización que están viviendo muchas empresas en la actualidad.
La brecha digital es el fenómeno a través del cual muchas empresas dejan de resultar atractivas frente a muchos consumidores porque no son capaces de ofrecer resultados o productos y servicios tan atractivos, ya que no han sido capaces de adaptarse a la nueva realidad dominada por internet y las nuevas tecnologías.
En este sentido, una disciplina que gana en importancia es el diseño gráfico. Muchos trabajadores que durante su actividad laboral tengan contacto con la comunicación, lo audiovisual o internet y las nuevas tecnologías, tienen una posibilidad de mejorar sus conocimientos en estas disciplinas gracias a los cursos de diseño gráfico en Madrid que ofrece Aula Creativa.
Al diseño gráfico se le suma también otra disciplina que ha ido ganando relevancia en los últimos años, el marketing digital. La sociedad actual, marcada por la dependencia casi exclusiva de la conexión a internet y los dispositivos móviles, encuentra en el marketing digital un vehículo muy potente para hacer llegar a los consumidores productos, servicios, modas y tendencias.
¿Cómo afecta la brecha digital en cuestiones de género y edad?
Cuando se habla de brecha digital, mucha gente piensa de manera inmediata en la edad, en personas adultas de una edad madura que se sienten incapaces de manejar equipos informáticos.
Esto, que es una realidad en muchos casos, afecta también a nivel de género. Atendiendo al estudio “El ecosistema de las tecnologías de la información y la comunicación desde la perspectiva de género en Barcelona”, la brecha digital también afecta a las mujeres, que encuentran más dificultad para acceder a la tecnología. Esta brecha digital aparece ya en las primeras etapas formativas a causa de estereotipos y roles de género.
La realidad muestra que la formación continua es un camino a seguir para mejorar la productividad a nivel empresarial, seguir mostrándose atractivos como empleados frente a las empresas y reducir la brecha digital que afecta tanto a mujeres como a trabajadores que alcanzan una determinada edad laboral.