5 fallos que pueden arruinar tu currículum

El diseño, la estructura o el lenguaje usados pueden acabar con el curriculum en la papelera. Por eso hay ciertos errores que se deben evitar a toda costa, si se quiere destacar y llamar la atención (en positivo) de un reclutador.

El curriculum es un documento pensado para darle al reclutador una información concreta sobre las trayectorias profesional y académica de un candidato al puesto de trabajo ofertado. De modo que no es sitio ni para alargarse en explicaciones, ni para justificar o hacer juicios de valor. Es, en esencia, un mero “listado” de méritos, logros y experiencias.

Si en el artículo anterior se exponen 5 claves para hacer que un curriculum destaque y sea leído, aquí vamos a ver otras tantos motivos que tienen el efecto contrario: hacer que el curriculum no sea tenido en cuenta o, a lo peor, vaya directamente a la papelera.

5 motivos que pueden arruinar un curriculum

1º.- La información importante, que se vea

Un error muy común es dejar información de relevancia para el final. El apartado “otros” está lleno de estos detalles que pueden ser determinantes, y muy del agrado del reclutador. El problema es que en muchos casos la lectura del curriculum no llega a ese punto final.

De modo que si has recibido premios en la Universidad, menciones en un puesto de trabajo anterior, logros profesionales o cualquier cosa digna de mención (y que sea pertinente al puesto solicitado), no dejes que pase desapercibida, y haz que el reclutador lo vea.

2º.- No cruces la línea de la arrogancia

Está bien que destaques tus méritos, y que lo hagas con entusiasmo y confianza en ti mismo. Pero ten mucho cuidado y no cruces la fina línea que une la autoconfianza de la prepotencia o arrogancia. Si haces que el reclutador te vea así, ¡estás perdido!

3º.- Mucho cuidado con la ortografía

Cuántas veces un curriculum es tirado a la basura por llevar errores ortográficos. Aunque parece muy obvio, es necesario recalcar este aspecto. Porque ningún reclutador va a aceptar errores ortográficos. Y en este apartado debe hacerse mención a los errores tipográficos, que son igual de condenables.

Si no estás seguro de tu ortografía, es muy fácil activar el corrector ortográfico que cualquier editor de textos tiene. O bien pedir ayuda a otra persona que pueda ayudarte. Todo con tal de no cometer un error que es determinante.

4º.- Cuidado con lo que destacas

Vale que debas destacar cosas tuyas. Pero que no sean cosas generales. Me explico con un ejemplo: no vale decir que eres una persona solidaria porque una vez has ido a un acto de una ONG, o porque hace dos meses diste 10 euros a la Cruz Roja. El mérito, en este caso es que seas voluntario, y regularmente acudas a ayudar y a colaborar en actividades sin ánimo de lucro.

5º.- No pases desapercibido

Ya que estás decidido a que tu curriculum destaque (y así debe ser), usa todos los medios a tu alcance para que así sea: de diseño, de redacción y de contenido. Facilita al reclutador su trabajo, y trata de hacerle la lectura de tu curriculum lo más fácil y amigable posible.